La periimplantitis es una de las enfermedades más comunes que afectan los tejidos blandos que rodean a los implantes dentales. Ésta, a diferencia de la creencia popular, no es causada por una reacción inmunitaria del organismo hacia el zirconio o el titanio, sino por malos hábitos del paciente o traumas. Si la periimplantitis no es tratada a tiempo, puede llegar a destruir el tejido óseo y se perdería el implante.
Esta afectación consiste en una lesión inflamatoria que inicia alrededor del implante, causando la pérdida del soporte óseo y, consecuentemente, el del implante. La periimplantitis es el resultado de situaciones que facilitan la acumulación de placa bacteriana circundante a los implantes dentales, estas bacterias se incrustan en las ranuras del implante y ahí se incuban hasta generar la inflamación, el malestar y el sangrado. Además de los síntomas mencionados, el enrojecimiento de la mucosa, el dolor ante la percusión y la movilidad del implante son la evidencia de que se sufre de una periimplantitis.
LA ENFERMEDAD QUE AFECTA A PACIENTES CON IMPLANTES DENTALES
Cuando el paciente muestra los síntomas de una posible periimplantitis, se recomienda que acuda de inmediato a su profesional de confianza, quien debe realizar los exámenes pertinentes, además de efectuar una radiografía para comprobar el estado del hueso. Dependiendo de los resultados, se puede optar por los siguientes tratamientos:
Terapia antiinfecciosa:
A partir de la eliminación de tejido muerto (desbridamiento), la esterilización del implante y antisépticos, se desinfecta todo el área subgingival periimplantaria afectada, y se emplea un sistema de antibioticoterápia para asegurar la recuperación de la zona y mitigar los daños de la temprana periimplantitis.
Tratamiento de superficie
En casos más avanzados, cuando la pérdida de tejido óseo es evidente y la superficie de titanio queda expuesta a la acumulación de bacterias, es pertinente llevar a cabo limpiezas y descontaminaciones con ácido cítrico, tetraciclina, arenado y láser. Con ello se busca eliminar la placa bacteriana y disponer una superficie que permita tanto la reinserción ósea, como la gingival.
Regeneración ósea guiada
Cuando la periimplantitis se encuentra en estados avanzados y se ha perdido una cantidad considerable del tejido óseo, el procedimiento se divide en dos etapas. La primera se enfoca en la esterilización de la zona mediante terapias antiinfecciosas; desbridamiento y antisépticos locales. Una vez el tejido está preparado, se inician los procesos para reestablecer los aspectos para una correcta osteointegración.
CIST
Este es un método de mantenimiento y tratamiento que se encarga de detectar las infecciones periimplantarias en etapas tempranas para evitar que avance, se esparza o acabe con el tejido óseo.
Entre otras observaciones, los especialistas recomiendan que los pacientes mantengan una higiene ejemplar y prescindir hábitos dañinos como lo son el tabaco y el exceso de alcohol.
A pesar de que la periimplantitis es una afectación reconocida, se considera poco común, pues las enfermedades relacionadas a los implantes dentales solo tienen un 2,5% de probabilidad de aparecer. Sin embargo es importante conocer las recomendaciones de los expertos para evitar una falla o para detectar y tratar la infección prematuramente, ya que se pueden extender con facilidad, afectando piezas dentales naturales, y del mismo modo el tejido gingival y óseo de la boca.
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